Sí, yo tampoco creo que el niño esté mal de la cabeza, simplemente estaría fascinado del espectáculo de un enorme cocodrilo zampandose a los otros animales más pequeños y más aún de ser él, el que desencadenaba el macabro "show".
Para mí no se diferencia en nada del placer sádico que sienten muchos carceleros de serpientes y otros reptiles, al alimentarlos con ratones, pollitos, u otros pequeños animales vivos. Y éstos no salen en las noticias y hasta se considera que practican un "pasatiempo" legítimo.
Falta educación, o mejor dicho buena educación, sí... pero si no hay sensibilidad y conciencia en los adultos, que se permiten cosificar la vida de las víctimas y traducirlas en euros de perdidas ¿qué podemos esperar de sus hijos?